¿Cómo está la situación en Perú?
Perú sigue en crisis y sin consenso. Este jueves el congreso rechazó por tercera vez adelantar las elecciones al 2023. Las muertes, que son sesenta y seis, ha dejado este gobierno y no hay culpa que se muestre o inicio de investigación alguna, ya que su mayoría fueron por protestas a nivel nacional. 48 votos a favor, 75 en contra y 1 abstención.
Los manifestantes exigen la renuncia de la presidenta actual de Perú. La situación de entrampamiento en el gobierno en la que, cada bancada quiere proponer su versión de adelanto de elecciones, motivados por sus agendas particulares.
En el mes de diciembre la situación en el Perú fue de consenso, ya que las protestas estallaron. No hubo consenso. Entonces, la gran mayoría de congresistas votó para que las elecciones generales (Legisladores y Presidente de la República) se adelantaran.
Cuando se rompe este consenso, la mayoría parlamentaria terminó dejando sin efecto ese adelanto de elecciones. No se puso de acuerdo en una nueva fecha, pues en la práctica la situación el Perú ha sido de incertidumbre pura. Esto parece un desafío a los manifestantes, porque piden que se vayan todos. ¡Lo más antes posible! El boicot resulta relativo porque las bancadas de extrema derecha se opone a cualquier adelanto de elecciones.
Las demás bancadas apoyan que estas se adelanten, pero difieren en cómo y cuándo. En la actualidad no se encuentra apoyo en el Estado peruano y la situación se agrava cuando persisten las manifestaciones. Perú Libre, partido oficialista, propuso el adelanto a julio de este mismo año y que no pasó de fotos a favor, se denegó. Esto sucedió porque consideran integrar dentro de su propuesta que se anexe un referéndum sobre si toda la ciudadanía quiere la instalación de una asamblea constituyente.
En este referéndum, la situación en el Perú, se ha convertido en la principal escoyo, fuente de discordia, en el parlamento. Lo que impide adelantar las elecciones para el que se requieren 87 votos entre 130 parlamentarios y en dos legislaturas. Esta legislatura termina el 10 de febrero del 2023 y lo que se acuerde debe ratificarse en la siguiente y hasta el momento no hay ningún consenso a la vista.
La situación en el Perú empeora cuando se muestra con evidencia montos de dinero dentro de cada individuo dispuestos a motivar con estos a que más personas se unan, realizando pagos. Con este bloqueo en el congreso la situación en el Perú se le suman otras, ya que consideran tener la iniciativa de las próximas elecciones como complementarias.
El presidente que asuma solo debe quedarse hasta el 2026. Otros consideran que debe haber reelección parlamentaria, la cual no parece seguir buen camino entre los ciudadanos. Los congresistas parecen querer quedarse hasta el 2026, la institución ya se ha desprestigiado, el asunto es grabe y la situación no perdona en el Perú, un país muy turístico.
La protesta ciudadana no amaina, pues se fortalece, sus reclamos parecen provenir de todos los sectores. Los congresistas esperan a que ello termine con el tiempo para que prolonguen su estadía en el legislativo.
Ante todo esta situación, la renuncia de Dina Boluarte parece ser la única opción de paz.
Si ello ocurre el Presidente del Congreso convocaría elecciones de inmediato. Sin embargo, la presidenta ha remitido un proyecto de urgencia que el ministro de justicia sustentará para que las elecciones sean en octubre del presente año y que asuman las nuevas autoridades a diciembre. En la práctica esto el congreso ya lo rechazó, entonces no se asegura que el proyecto pueda seguir y se prolongaría esta situación en el Perú.
